¿Cistitis recurrente? Los ejercicios de suelo pélvico pueden ser tu mejor defensa

Cistitis, escapes, molestias… el suelo pélvico tiene mucho que ver. La buena noticia: puedes fortalecerlo con ejercicios sencillos que mejoran tu calidad de vida y tu bienestar íntimo.

Los ejercicios del suelo pélvico son una alianza terapéutica para la prevención y recuperación de las infecciones urinarias. Las infecciones del tracto urinario, o conocidas por nosotras como las famosas cistitis, afectan a millones de mujeres todos los años, con síntomas muy concretos y especialmente desagradables como son escozor al orinar, una inmediatez en la necesidad de miccionar, y leve dolor suprapúbico.

Entre sus causas más frecuentes de la cistitis se encuentra la interacción de la bacteria Escherichia coli que, además, suele tener la condición de que, en un alto porcentaje, presenta recidivas, por lo que el planteamiento de cara a abordar estas infecciones urinarias debe ir más allá del tratamiento antibiótico.

Entre los tratamientos de las infecciones urinarias contamos con complementos alimenticios específicos, tanto en la prevención como en el transcurso de la misma, además de con la creciente evidencia científica de asociarla a una alianza terapéutica con ejercicios específicos de nuestro suelo pélvico.

Relación entre el suelo pélvico y la cistitis

Órganos específicos, como son la vejiga, el útero, la uretra y el recto, están inervados por el conjunto de músculos, ligamentos y tejidos conectivos, que van a formar nuestro suelo pélvico. Por lo tanto, podemos decir que, además de su función específica estructural, todo este conjunto va a desarrollar una función crucial en el control urinario, añadiendo, además, y no menos importante, un frente a la defensa de infecciones urinarias.

Si nuestro tono muscular del suelo pélvico es mínimo, o por el contrario excesivo, aparecen disfunciones que pueden provocar la aparición de cistitis:

• La hipotonía. Al tener unos músculos débiles, nos puede generar una evacuación no total, facilitando con ello que se produzca una infección bacteriana por orina residual al no haber sido eliminada.
• La hipertonía. Por el contrario, una constante contracción de la musculatura del suelo pélvico nos genera de igual manera vaciados incompletos y un aumento de la presión en la vejiga.
• Disbiosis vaginal. Obviamente, nuestra microbiota urogenital puede verse afectada si la musculatura no se encuentra en condiciones óptimas, provocando con ello que nos expongamos a una mayor proliferación bacteriana por parte de los patógenos.

Dicho esto, podemos resumir brevemente que el entreno de nuestro suelo pélvico no solo nos va a prevenir de las pérdidas de orina o prolapso, sino que está íntimamente relacionada con la protección de nuestro tracto urinario frente a las posibles infecciones.

Beneficios de los ejercicios del suelo pélvico

Hablamos de los reconocidos ejercicios de Kegel, que se trata de una técnica de ejercicios de fortalecimiento junto con otras técnicas específicas para conseguir la relajación muscular.

Estos ejercicios de suelo pélvico presentan un volumen alto de beneficios en los pacientes que tienen recurrencias en las cistitis e incluso que usan antibióticos de forma persistente.

Mejora un vaciado completo

Es un hecho que el fortalecimiento del suelo pélvico nos ayuda a una mejor micción, consiguiendo con ello un vaciado completo de la vejiga y, por lo tanto, disminuyendo la posibilidad de orina residual que actúe como un reservorio de bacterias patógenas.

Mayor control del esfínter

Evitaremos la incontinencia y también una mejor gestión del estímulo miccional con el tono muscular adecuado. De esta manera no solo conseguimos disminuir el dolor asociado o las ganas inmediatas de orinar típicos de la cistitis, sino que ayudamos a reducir la constante frecuencia urinaria.

Posibilidad de disminuir el dolor pélvico

La práctica de estos ejercicios les mejora la tensión muscular pélvica tratándose de un componente fundamental junto con la reeducación perineal, para ayudar a estos músculos a relajarse y conseguir así un mejor umbral del dolor.

Microbioma urogenital perfecto

Visto todo lo anterior mantener una musculatura equilibrada dificulta el crecimiento de aquellas bacterias patógenas por acumulación de orina residual, por lo que está directamente relacionado con mantener una flora vaginal saludable.

Ejercicios de Kegel para prevenir la cistitis

Se trata de unos ejercicios que no requieren equipos complejos y pueden realizarse en casa sin ningún tipo de problema. Desde Yo Elijo Cuidarme, siempre nos gusta recomendaros que ante cualquier duda os apoyéis en la supervisión profesional, en este caso, de una fisioterapeuta especializada en uroginecología.

Algunos de los ejercicios para fortalecer el suelo pélvico que podemos realizar en casa son muy básicos, por ejemplo:

Ejercicio 1: contraemos y relajamos

• Nos acostamos o tumbamos cómodamente.
• Contraemos los músculos del suelo pélvico como si parásemos el flujo de orina.
• Mantenemos la contracción durante 5 segundos para posteriormente relajarla otros 5 segundos.
• Repetimos este proceso 10 veces 3 veces al día.

Ejercicio 2: contracciones muy rápidas

• Contraemos y relajamos los músculos del suelo pélvico muy rápidamente durante 2 – 3 minutos. Este ejercicio mejora la capacidad de respuesta del periné.

Debemos entender que la prevención debe ser parte de una estrategia en nuestra salud básica.

En cuanto a las cistitis, dadas sus repeticiones y el elevado porcentaje de mujeres que lo padecen, tenemos que acotar tanto el malestar que genera como la frecuencia y repetición del uso del antibiótico.

Se busca que el entrenamiento del suelo pélvico tenga un papel más fundamental en la atención primaria y en los programas de salud básicos. Se trata de prácticas seguras económicas y que aportan unos efectos especialmente beneficiosos sobre la calidad de vida.

A modo de conclusión, podemos decir, por lo tanto, que la práctica de los ejercicios para el suelo pélvico es de especial interés, tanto de forma preventiva como de forma complementaria al tratamiento médico e incluso abordaje del dolor crónico, ya que el trabajo realizado por esta musculatura permite a muchísimas mujeres recuperar cierto control sobre su cuerpo y su bienestar.

La opción de introducir este tipo de programa de salud puede ayudarnos a muchas de nosotras a marcar la diferencia en un problema que nos afecta tanto y de manera tan frecuente. Por eso, te animamos a que compartas este post en tus redes sociales para que todas tus amigas, conocidas o familiares, puedan beneficiarse de esta información y poner en práctica estos ejercicios para el suelo pélvico y con ello, gozar de un mejor estado de salud.

Nosotras ya hemos empezado con nuestros ejercicios, porque Yo Elijo Cuidarme, ¿y tú?