Defensas bajas: ¿Cuáles son los síntomas y qué puedes hacer?

¿Defensas bajas? ¡Súbelas con estos consejos!

Tener las defensas bajas tiene causas y síntomas muy conocidos, como sentirse débil y cansado, y puedes remediarlo sabiendo qué vitaminas y alimentos tomar. Desde Yo Elijo Cuidarme te contamos cómo conseguirlo.

En invierno, la palabra “defensas” es muy escuchada por todos lados. Cuando tenemos un resfriado, una gripe o cualquier otro malestar les hacemos responsables. Pero ¿cuáles son las causas de que nuestras defensas disminuyan y, por tanto, no puedan cumplir su cometido?

Las defensas, el sistema inmune o inmunitario, es un sistema de protección de nuestro organismo frente a agentes externos de diferente origen (virus, bacterias, hongos, tóxicos…) que pueden causarnos posibles infecciones.

El sistema inmune está formado por unas células llamadas leucocitos o glóbulos blancos que mediante un proceso de diferenciación se convierten en distintas células con funciones específicas para una respuesta más eficaz, un proceso al que se le denomina sistema inmune adaptativo. Cuando estas células están “en forma”, los riesgos de padecer infecciones son mucho menores.

Antes de este proceso tan específico, nuestro organismo tiene un sistema de protección más simple llamado sistema inmune innato, que está formado por barreras físicas como la piel o la mucosa y barreras químicas como el pH del estómago, sin olvidarnos de la función de protección que realiza también nuestra microbiota dentro de este mismo sistema.

Cuando tenemos las defensas bajas es porque nuestro sistema inmune se ha debilitado y corremos el riesgo de enfermar. Clic para tuitear

Causas de tener las defensas bajas

Entre las causas más comunes que disminuyen la función de nuestro sistema inmune, podemos destacar:

Estrés

El estrés es un cambio en el equilibrio (homeostasis) del organismo, lo que produce cambios fisiológicos, bioquímicos y, por supuesto, de comportamiento. Estos cambios pueden ser consecuencia de acontecimientos o incluso emociones que afectan a nuestra vida.

Sabemos que el sistema inmune y el sistema nervioso están conectados entre sí y el estrés modifica esta relación, ya que puede modular la función del sistema inmune por diferentes procesos que dependen del origen, de la duración o la intensidad del suceso estresante.

El estrés es una de las principales causas de las defensas bajas. Clic para tuitear

Mala alimentación

La implicación de la alimentación con nuestro sistema inmune es directa debido a que nuestro sistema inmunitario está formado por células y estas, sean cuales sean sus funciones, necesitan una correcta nutrición.

Más allá de lo evidente, una alimentación adecuada va a garantizar una buena salud de las barreras físicas como la piel y la microbiota, por lo tanto, van a ayudar a nuestra inmunidad innata. Los alimentos cuentan con infinidad de nutrientes, mayormente fitoquímicos, que mejoran la salud de nuestro sistema inmunitario y disminuye el riesgo de enfermar.

Falta de sueño reparador

Numerosos estudios realizados hasta el día de hoy determinan que el sueño y el sistema inmune tienen una estrecha relación.

Si no dormimos bien o el sueño no es reparador, esto desencadena en una mala respuesta inmune, disminuyendo la producción de anticuerpos, reduciendo la actividad de unas células inmunes llamadas Natural Killers, así como pudiendo aumentar la respuesta inflamatoria que dificulta el trabajo de nuestras defensas.

Dormir bien y suficiente es fundamental para evitar las defensas bajas. Clic para tuitear

Sedentarismo

Desde hace años se ha estudiado el efecto negativo que tiene la falta de ejercicio físico en nuestro organismo y entre las consecuencias se encuentra la debilitación del sistema inmune.

Enfermedades crónicas

Condiciones de salud crónicas como la diabetes, la obesidad, el síndrome metabólico o enfermedades autoinmunes pueden debilitar el sistema inmunológico.

Edad avanzada

Con el envejecimiento, el sistema inmunológico tiende a volverse menos eficiente, lo que puede hacer que las personas mayores sean más susceptibles a las infecciones.

Hay diversos factores que nos hacen más propensos a tener las defensas bajas. Clic para tuitear

Agentes patógenos y tóxicos

La exposición frecuente a agentes patógenos, como virus o bacterias, puede agotar el sistema inmunitario, especialmente si no se permite un tiempo adecuado para la recuperación entre las infecciones, al igual que la exposición constante a tóxicos como el alcohol o el tabaco.

Medicamentos

Algunos medicamentos, como los corticosteroides o los tratamientos de quimioterapia, pueden suprimir el sistema inmunológico como efecto secundario.

Defensas bajas: ¿Cuáles son los síntomas y qué puedes hacer?

Alimentos y micronutrientes relacionados con la salud de nuestras defensas

Si hablamos de nutrición y defensas, podemos diferenciar los efectos que tienen los macronutrientes y los micronutrientes en nuestro sistema inmune innato y nuestro sistema inmune adaptativo.

Tomar vitaminas y otros nutrientes para las defensas bajas, será una solución eficaz. Clic para tuitear

En cuanto a los macronutrientes para subir las defensas, destacamos:

Proteínas

Influyen en la inmunidad innata, garantizando el buen estado de las barreras físicas, y en la inmunidad adaptativa, influyendo en la actividad de los linfocitos y las células Natural Killers.

Grasas

Destacamos la importancia de los ácidos grasos Omega 3 que ayudan al buen funcionamiento de la respuesta innata y reducen los procesos inflamatorios.

En cuanto a los micronutrientes, podemos destacar, dentro de las vitaminas y minerales ayudan a reforzar las defensas, los siguientes:

Vitamina A

Ayuda a la producción de los linfocitos y al buen funcionamiento de las Natural Killers.

Vitamina D

Interviene en la diferenciación de las células del sistema inmune adaptativo y a la regulación de la respuesta inmunitaria.

Vitamina C

Al igual que la vitamina D interviene en la diferenciación de las células del sistema inmune adaptativo y a la regulación de la respuesta inmunitaria.

Vitamina E

Garantiza la integridad de las barreras físicas.

Vitaminas del grupo B

Participan en la activación de los linfocitos y de las Natural Killers.

Zinc

Participa en la función de la respuesta innata, regula la producción y la función de las células del sistema inmune adaptativo.

Hierro

Ayuda a la producción de los linfocitos y al funcionamiento de las Natural Killers.

Una vez más, la alimentación juega un papel fundamental en nuestro bienestar. ¿Necesitas ayuda para incluir todos los nutrientes mencionados en tu dieta? Podemos ayudarte en nuestro Servicio de Nutrición Online completamente gratuito.

Además, en otro artículo te explicamos las mejores plantas naturales para aumentar las defensas.

¿Qué tomar para las defensas bajas? ¡Alimentos que te ayuden a fortalecer tu sistema inmunitario! Clic para tuitear

Consejos para subir las defensas

Si queremos fortalecer el sistema inmunitario y evitar el descenso de nuestras defensas debemos:

  1. Tener una alimentación equilibrada en la que las verduras y las frutas sean las protagonistas de nuestra mesa.
  2. Realizar ejercicio físico moderado incorporado en nuestra rutina.
  3. Mejorar nuestro sueño, para que llegue a ser reparador.
  4. Reducir el estrés diario y gestionarlo de manera que no se convierta en crónico.
Con un simple cambio de hábitos podemos evitar las defensas bajas. Clic para tuitear

Nuestras defensas son esenciales para una buena calidad de vida, nos defienden contra los agentes patógenos, nos ayudan con los procesos inflamatorios evitando que se vuelvan crónicos, en definitiva, nos mantienen con vida.

Una combinación de factores ambientales, de estilo de vida y de salud pueden contribuir a la disminución de nuestras defensas y hacer que seamos más propensos a las infecciones.

Para aumentar y fortalecer las defensas de nuestro cuerpo tenemos que alimentar correctamente con una dieta rica en vitaminas y minerales, realizando ejercicio físico como parte de nuestra rutina diaria, evitando el consumo de tóxicos como el alcohol y el tabaco. Además, debemos gestionar nuestro estrés y mejorar la calidad del sueño.

Ayudar a nuestras defensas es necesario para mejorar nuestra calidad de vida, prevenir enfermedades y sentirnos con energía. Por tanto, ¿por qué no lo compartes con tus contactos en las redes sociales? ¡Así todos podrán cuidar con cariño de sus defensas!

Nosotros ya tenemos la nevera y la despensa llena con ellos, porque Yo Elijo Cuidarme, ¿y tú?

Si deseas más información sobre la Nutrición Integral, te animamos a descargar el Libro ¿Por qué no Pierdo Peso? (Si hago dieta y ejercicio) de Laura Rojas, Nutricionista y Health Marketing Specialist de Forté Pharma.

Deja tu comentario